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23 de diciembre de 2024

Del reino de la estupidez

 


Del reino de la estupidez al reino de la ridiculez

(Publicado originalmente en el diario digital de Nicaragua La Prensa)

 

“A la estupidez, que no conoce límites, solo cabe combatirla. Es preciso sacudírsela permanentemente para no tener que deplorar males mayores, porque es más dañina que la maldad. El Breve tratado sobre la estupidez humana, de Ricardo Moreno, va dirigido contra los idiotas, tontos y necios que nos rodean, y contra las ideologías que contribuyen poderosamente cada día a incrementar sus filas y fomentar la estupidez: son jaulas de las que no se puede salir, que impiden pensar, discurrir, dudar y razonar.” (Tomado de la sinopsis del tratado mencionado).

Continúo, estimado lector, descontinuado de la saga. Hay premuras que me llevan a esta suspensión. Pido humildemente al que lee, que comprenda mis limitaciones puesto que en el cuento anterior, El rey ha muerto, viva el rey, tuve un lapsus cuando cité textos de la Vulgata (Biblia traducida del latín al español), por lo que deseo indicar que se me fue Sabiduría 32: 1-6 por Isaías 32:1-6. Sabiduría solo llega al capítulo 16. Pido disculpas si le he causado ansiedades a alguno que otro lector, aunque como todo lapsus, fue involuntario.

La primera cita textual de la Vulgata en el cuento anterior fue, “después, con el discurso del tiempo, tomando cuerpo aquella impía costumbre [de darle culto al rey] el error vino a ser observado como ley, y adorábanse los simulacros por mandato de los tiranos. Y así hacían traer desde lejos los retratos de aquellos a quienes no podían los hombres honrar personalmente por estar distantes a fin de reverenciarle con su culto como si estuviera presente.” Esto parecería repetitivo, pero pienso que no lo es. Ya no le basta al rey reinar en su territorio, sino que pretende expandirse para que otros reinos cercanos se inclinen ante él (los otros del SICA).

El rey enfurecido, porque ha sido desnudado, y su reina virulenta, por medio de sus bufones, incriminan a los otros reyes de ser solo sirvientes del emperador del Norte. Algunos del reino de la estupidez se lo creen por supuesto, otros solo son oportunistas que vociferan sus estupideces como serviles de la corte que son. Solo son repetidores de sus amos por tele ventriloquía (teletrabajo), como por arte de magia brujeril.

Ahora que otro tirano ha sido despojado a balazos de su reino en Siria, y con su ejército en desbandada, igual después de medio siglo de dinastía, y porque sus aliados rusos e iraníes no pudieron venir al rescate por su propia estupidez, la que los ha debilitado hasta el borde del colapso; entonces ¿qué viene? ¿Otra tonta vanguardia como la de 1979 en Nicaragua? Allá se está en otra dimensión, en culturas derivadas de civilizaciones primarias. (Más sobre esto en otro cuento).

La oportunidad se les presenta en Siria a los rebeldes islámicos y no islámicos de la coalición, de ser un ejemplo para la humanidad, porque Siria representa, históricamente, uno de los principales cruces estratégicos entre el oriente y el occidente y de regreso –por el Mediterráneo–, por lo que más de una potencia regional y mundial han hecho lo suyo en esa guerra para influir en su desenlace, ya sea apoyando al  tirano aliado Bashar al-Assad, o para evitar el resurgimiento del brutal y sanguinario Estado Islámico, o para evitar el fortalecimiento de las fuerzas kurdas. (Rusia e Irán por un lado, Israel y los Estados Unidos por otro, y Turquía por otro).

Después de tanta muerte y sufrimiento humano en Siria, por una guerra que duró trece años desde que estalló la Primavera Árabe en el 2010, millones de desplazados y otros tantos millones de refugiados, principalmente en Turquía, Líbano y Jordania, ¿los reyes no saben qué decir más que reproducir su propia estupidez? Culpa del imperialismo yanqui y de Israel. ¿No de Rusia ni de Irán con sus Hezbolá, ni del dinástico tirano de Siria, quien reprimió salvajemente en el 2011 a los manifestantes que pedían un cambio, provocando así la guerra civil? ¿No suena esto un tanto conocido? De hecho, Rusia fue la que más bombas lanzó desde el aire, tratando de proteger el trono de su aliado y sus propias bases militares en territorio sirio, la aérea y la naval, desde donde lanza sus operaciones en la región y en el África subsahariana. No hay imperio bueno.

Los gobernantes de los Estados regionales (y mundiales) saben bien lo que pasa en el Oriente Próximo y por qué, incluyendo lo del pueblo kurdo distribuido entre Turquía, Siria, Irak e Irán, pero colindantes (el Kurdistán), quienes con sus aproximadamente 40 millones de habitantes han pretendido tener un Estado propio, o cuando menos su autonomía. Fue por esto que el entonces Saddam Husein les envió de regalo agentes químicos en 1988 para frenar un levantamiento kurdo en el norte de Irak, matando indiscriminadamente todo ser viviente. 

Saben además esos gobernantes porqué han seguido los bombardeos de Israel contra infraestructuras, sitios y equipos militares del anterior régimen sirio, incluyendo fábricas de armas químicas. ¿No es para evitar un potencial reagrupamiento de los seguidores de al-Assad, ahora refugiado en Rusia? ¿O para que no caigan en manos de terroristas enemigos de Israel? ¿Y qué hicieron los de la vanguardia sandinista cuando el entonces dictador abandonó el país en 1979, y su guardia se disgregó? Lo mandaron a asesinar en septiembre de 1980 en Paraguay, por si pretendía regresar.     

El régimen sirio colapsó en diez días o por ahí desde la ofensiva final, por su propio agotamiento y por la debilidad de sus aliados, provocada por la respuesta militar de Israel a la agresión de Irán y sus Hezbolá, ahora diezmados en el Líbano, y por la guerra de Rusia en Ucrania. Israel, por su parte, ha cometido crímenes de guerra en Gaza, sin dudas, pero ¿quién provocó esa guerra?

“La Primera Ley Fundamental de la estupidez afirma sin ambigüedad que siempre e inevitablemente cada uno de nosotros subestima el número de estúpidos que circulan por el mundo.” (Las leyes fundamentales de la estupidez humana, de Carlo M. Cipolla). Tan es así, que de tan estúpidos que algunos son, tan solo hacen el ridículo.

P.S.: Estos cuentos son producto de la imaginación, por tanto cualquier similitud con alguna que otra realidad, es un acto de brujería.