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30 de diciembre de 2020

Los falso profetas

 

Los falsos profetas y sus acólitos en el 2021

(Artículo de opinión coyuntural en Nicaragua publicado en el diario La Prensa el 29/12/2020)


Vengo culturalmente de la religión católica. Los lienzos sobre el infierno en el Colegio Pedagógico de Managua parecían reales. Hoy me darían risa, pero admito que estaban muy bien hechos y que surtían su efecto. Las llamas parecían salir de los lienzos así como los demonios con cola y cuernos. Uno debía rezar cada noche por la salvación eterna. Era la época de Pío XII papa, y yo era un niño. 




La religiosidad en mí se esfumó tiempo después, y entiendo que ya no existe el limbo, el purgatorio, ni el infierno. Dicen los que saben que hoy se trata de la contemplación eterna de un rostro (el infinito). Algo así como en el budismo, y en ambos casos se debe tener un alma y morir en gracia (cristianismo) o iluminado (budismo). No me queda claro adónde van los otros, con la salvedad del budismo, aunque pretendo que haya un infierno para los que han cometido crímenes de lesa humanidad. 




En el budismo, si no se muere iluminado se regresa al mundo para recorrer nuevamente el camino hacia la perfección. Se regresa una y otra vez, porque se hace sin conciencia ni memoria de lo recorrido anteriormente. El cristianismo es más cruel. Solo se tiene una oportunidad para llegar a la contemplación. Una vez que el cuerpo se va, el alma ya no regresa. Uno solo lo hará en cuerpo y alma, el de la segunda venida según los textos. 

Para eso faltan cinco mil millones de años según los astrofísicos, cuando el sol se convertirá en una estrella roja gigante que atraerá al planeta, calcinando toda existencia en su superficie e hirviendo las aguas hasta transformarlas en una inmensa sopa de pescado antes de despedazarlo. 

En el colegio de los jesuitas de mi adolescencia aprendimos a racionalizar la religión, con su sesgo por supuesto, y se dividieron en conservadores y en revolucionarios. Fuimos por tanto un experimento, y está bien, prueba y error para tratar de llegar a una utopía social frente al marxismo ateo que se perfilaba como ganador. Ambas utopías fracasaron. Los jesuitas sin embargo andan por aquí en la perenne búsqueda de sí mismos. Los rusos y los chinos continentales igual, con la salvedad que los rusos regresaron a la Iglesia Ortodoxa Rusa (cristiana) cuando colapsó la URSS. China todavía no ha regresado al budismo. 

Siento lástima por los falsos profetas de aquí y sus acólitos porque no aceptan que su mundo es finito. ¡No podrá durar más de cinco mil millones de años! Al respecto la Ley de los Derechos de las Personas con Discapacidad, firmada por Wilfredo Navarro (acólito) y Daniel Ortega (falso profeta), dice que no debe haber discriminación alguna por motivos de discapacidad. 

Sobre la participación en la vida política y pública la ley dice: “El Estado debe garantizar la libre participación de las personas con discapacidad en la vida política y pública, ya sea eligiendo o siendo electos para fungir como funcionarios o empleados públicos.” 

Es decir, los falsos profetas y sus acólitos, aun teniendo inmensas discapacidades mentales, tienen derecho a que se les respeten sus derechos políticos y libertades fundamentales, lo que no tienen los ciudadanos sin discapacidades por la sola voluntad de los falsos profetas y sus acólitos.   




Aquí ya me perdí, porque no me ha caído el rayo de la conversión a los falsos profetas, y menos aún a sus acólitos. Sigo pensando por tanto que el falso templo en el 2021 continuará existiendo solo en la mente de los discapacitados del régimen, que gracias a la vida son muy pocos, y van de salida, o mejor dicho ya están en el infierno.

 

19 de diciembre de 2020

La batalla de los comunicados

 

La batalla de los comunicados

(Artículo sobre Nicaragua publicado originalmente en el diario La Prensa el 18/12/2020)

 

“Si no sabes qué hacer no saques un comunicado”


Dicen que aquí existe el síndrome de Pedrarias por lo de la proliferación de déspotas. Pedrarias fue un malvado en sus ambiciones de fama y fortuna, y no tuvo escrúpulo alguno para reventar a los indios cuando ejerció la gobernación de Nicaragua a inicios de la colonia. Ya antes había decapitado al fundador de León y Granada por considerarlo un rival, emitiendo un comunicado acusándolo de traición. Así justificó el ajusticiamiento de Hernández de Córdoba, cosa que también hizo en Panamá con Núñez de Balboa (su yerno), el descubridor del Océano Pacífico para ellos. 

He ahí el llamado síndrome de Pedrarias. Eliminar a quien se interponga en el camino hacia el poder y las riquezas para sí y la familia, y ser constante en la cruenta supresión de los rebeldes, porque desde entonces se suceden los abriles. 

Pero quizás el primer comunicado (escrito) que se conoce sobre la traición, es el siguiente: “Si un oficial o un especialista militar que había recibido la orden de partir para una misión del [déspota] y no fuese, ese oficial o ese especialista militar recibirá la muerte; el denunciante del hecho [el sapo] tomará su hacienda [la recompensa].” ¿Suena familiar? 

Ese texto es parte de un código que data del siglo XVIII a.c. y procede de la Babilonia del rey Hammurabi (hoy Irak). Está labrado en caracteres cuneiformes en una estela de basalto que lleva su nombre y que le fue revelado por el dios Marduk, según consta en la introducción. El código es anterior en más de quinientos años a las Tablas reveladas por Yahvé a Moisés en un idioma derivado del egipcio, en el que Moisés fue educado según se dice en el Libro del Éxodo





De esas Tablas y otras revelaciones se derivó igualmente la pena de muerte por traicionar a Yahvé. Quien lo niegue que vaya al Pentateuco. El Nuevo Testamento por su parte se refiere a una nueva religión, de tal manera que los judíos, los del pueblo escogido, no la aceptan como propia. Si el judaísmo desde sus inicios fue una religión tribal minoritaria, hoy cuenta con un poderoso aliado, por lo que Yahvé, amparado en el Mossad y los U.S.A., sigue venciendo a Marduk en la batalla de los comunicados. 

La estela con el Código de Hammurabi se encuentra en un museo en París. Las Tablas de Moisés no se sabe dónde fueron a parar. Los franceses han sido colonizadores como cualquier potencia imperial en algún momento de su historia, y se apropiaron de la estela como símbolo de una civilización milenios más antigua que la suya. 

¿Pero qué puede importar hoy en Nicaragua una batalla de comunicados? Por allá lejos sigue habiendo musulmanes, judíos, hinduistas, budistas, minorías cristianas y zoroástricas mientras no sean suprimidas por fanáticos religiosos, o por los chinos continentales (reducción de los uigures musulmanes). En occidente tenemos confesiones cristianas de distinto signo que en el pasado se han descalificado unas a otras a punta de ex comunicados y de fogatas humanas. 



Símbolo zoroástrico 

Pedrarias de Nicaragua solo siguió el patrón de los conquistadores provenientes de la España de entonces (haciendo caso omiso a los comunicados de Bartolomé de las Casas): someter a los nativos, imponerles su religión, sacarles todo provecho imaginable e inimaginable, reducir a los rebeldes y emitir comunicados justificando las matanzas de los infieles golpistas. Algo así como los comunicados diarios de la esposa del Pedrarias de hoy. (Por ahí viene el asunto).

¿Y los opositores al régimen? Tómese el presente como un comunicado rebelde para que los que han dejado de emitir los propios no vuelvan a hacer el ridículo, aunque después de todo, lo último que se pierde en este desdichado país es el sentido del humor. ¿Y en el 2021?, “depende, todo depende (Pau Donés, Jarabe de Palo).



2 de diciembre de 2020

Religiones, el falso templo y los huracanes



Religiones, el falso templo y los huracanes

(Artículo publicado previamente en La Prensa de Nicaragua el 1/12/2020))

 

Continúo refiriéndome a rasgos de la humanidad que me llaman la atención. No se trata de escritos científicos, sino que de metáforas, sarcasmos, sátiras e ironías, aunque con base histórica. Digo esto porque vengo de la sola evolución, pero igual respeto a los creacionistas mientras no sean fanáticos. No tengo sin embargo explicación para el origen de la materia. Lo demás ya es conocido y se siguen haciendo descubrimientos sobre la evolución del todo, aquí en la tierra como en el cielo.

La teoría de la Gran Explosión tiene un interés relativo para el suscrito, lo admito. Está demostrado por la astrofísica que el universo se expande desde una fuerza inicial que crea el espacio, el cosmos y el tiempo, pero no se sabe de dónde vino la materia prima. He ahí quizás el porqué de los que dicen que hay un Dios Creador. Digo un Dios, porque desde los inicios de la humanidad han existido muchos dioses. Unos por generación espontánea, otros por derivación, copulación o por inseminación cósmica. Es decir dioses varones y diosas mujeres. No conozco dioses LGTBI, lo que no significa que no los habrá en una futura mitología.



La religión estructurada más longeva ha sido la del Imperio Egipcio (politeísta, anterior a la judía monoteísta). Duró algo así como tres mil quinientos años, hasta la imposición oficial del cristianismo en todo el Imperio Romano por Teodosio, en el año 380. La clase sacerdotal egipcia con su poder, privilegios y las creencias populares, había superado anteriormente los embates del monoteísmo de Akenatón, el faraón reformista del siglo XIV a.c. El cristianismo, por otro lado, tiene dos mil años de existencia basado en un solo Dios, aunque triple, y en ángeles y satanás (los católicos agregan a una virgen).

Desde sus inicios el cristianismo se dividió en corrientes cuyos representantes se descalificaban unos a otros por la hegemonía, o quizás por una idea. Tuvieron seguidores unos y otros, y se celebraron después concilios de obispos, para unificar criterios con el fin de determinar quiénes serían los herejes a excluir o eliminar.

La ortodoxia del credo de Nicea (siglo IV), en la Turquía actual, pretendió zanjar las disputas teológicas de la época, derivadas de un pensamiento especulativo decadente (griego) y de un extraño judaísmo. Nicea es musulmana desde el año 1331, cuando los turcos otomanos, procedentes de Asia Central se expandían como cualquier otro imperio, o aspirante a serlo.

Se creó así el Imperio Otomano, con el islam como religión predominante, que tiene mil cuatrocientos años de existencia. El Imperio Otomano decayó siglos después y fue disuelto al finalizar la Primera Guerra Mundial. Antes, Bizancio, llamada posteriormente Constantinopla, había sido la capital del Imperio Romano de Oriente (cristiano), y había caído ante los otomanos en el año 1453. El último reino musulmán en España cayó en 1492.

Constantinopla es hoy Estambul, la del templo cristiano Hagia Sophia, mandado a construir por el emperador Justiniano en el siglo VI. Ahora es una mezquita por mandato de Recep Tayyip Erdoğan, el populista presidente de Turquía, pretendiente protector del nacionalismo islámico y de los musulmanes ante los infieles de occidente.

Turquía es Estado Parte de la OTAN, como Grecia, que fue provincia del Imperio Otomano por trescientos años, y que hoy es muro europeo de contención frente a los turcos. Grecia ha tenido que pedir auxilio a sus aliados para contrastar el expansionismo de Erdoğan en el Mediterráneo Oriental. (Turquía es productora de armas y de naves de guerra).

El Imperio Otomano llegó a las puertas de Viena en dos ocasiones, en 1529 y en 1683. Los otomanos ya habían tomado los Balcanes y Hungría, pero en Viena fueron repelidos por coaliciones multinacionales de defensa, no del cristianismo necesariamente, sino de la propia supervivencia.

¿Sobrevivirá en Nicaragua el sincretismo religioso del falso templo a los falsos profetas y su feligresía?  No lo creo, precisamente porque son falsos, salvados temporalmente por dos huracanes.